jo j o s é maría arg ar g u edas ed as
Dos estudios sobre Huancayo Evolución de las comunidades indígenas Estudio etnográfico de la feria de Huancayo
josé maría arguedas
Dos estudios sobre Huancayo Evolución de las comunidades indígenas Estudio etnográfico de la feria de Huancayo
J ?
Pág. X R Í R O D U C C I O N * ............... . . . . . . . . . .
III
E V O L U C I O N D E L A S C O M U N I D A D E S C A M P E SI N A S I.
II.
Correl ació n histó rica de razas y culturas en el -Valle -del Ma nt ar a. St atu s de l in dio . . . . . . ................. . . . . .
2
A l i an za H ua n ca -X au xa -H is pá ni ea . . . . . Huancay o, de ald ea Ind íg ena a- capi tal in dustrial y foco de difusión'y.resistencia de la cu lt ur a- me st iz a . . ............ . . El periodo de for mac ión de los estratos soc iales modernos . . . . . . . . . . . .
11 26
.
III.
La M o n o g r a f í a de 1582 . . . . . . . . . . Sobr e la ag ri cu lt ur a y ga na de rí a . . . . Ind ustr ias 'y com erc io . . . . . . . . . . El »compendio y descripci<5n de las indias ............ . occid enta les " . . . . . . . Alg uno s datos c omp lem ent ari os . . . . . . IV.
Un a tesis sobre Sic aya . . . El censo de 1940. Tradició n, cultura . . . . . . . 4 . . P o b l a c i ó n ru ra l y u r b a n a . .
34 34 36
.
38 46
. . . . . . ec ono mía y
5®
. . . . .
57 58
.
. . . . . .
Censo de la población económicamente acti va . . . . . . . . ................... El cuadro lingüístico. Traduc ción y cultu r a ................. . . . . . . . . . . . Los focos que chua s e his pán os del vall e . C a u s as d e t e r m i n a n t e s d e l a u m e n to de la pob la ci ón en Huáñca.yo. Mu es tr eo 'e n el dis trito de El Tambo . . . . . . . . . . . . . .
V.
33
Totales generales correspo ndientes a 195 familias ...................... . . . . . . Notas é ESTUDIO ETNOGRAFICO DE LA FERIA DE HUANCAYO I. Causas det ermin antes de la for mac ión d e la ci udad y de su ori gin al conformación ur baña 1. Signos religiosos, eleme ntos or igina rios de la c i u d a d ............ El núcleo religioso, el camino real y l a u b i c a c i ó n g e o g r á f i c a ............... 2. El tránsito interno en el valle del Man
60 62 64 75 79 85
90 92
II.
taro y el trá nsi to in te r- reg ion al . . El proc eso de cre cim ien to de la du da d has ta el siglo XIX
96
1. Los dos tambos .......................... 2. El Centro Cívico y Comercial. La con£ trucción de la Plasa e Iglesia Matri ces. El Me rcado . . . . . . . . . . .
99
.
III.
3. El centro come rcial rut a de Norte a S u r ........................ .............. 4. L a c on fi gu r ac ió n de l a c iu da d . . . . La feria como causa determina nte del cre cimie nto de la c iudad y de su espe cial con figuración I I T""7 I ü I ¡ I I 7 1 . L a i n f o r m a c i ó n d e R a y m o n d i ............ 2. L a i nf or ma ci ó n de N em es io R ae s . . . . 3. El último periodo de transformación de la feria. In fo rm ac ió n de J. Ro jas , , 4. El caso de los mayo rist as del comer ció de gran os y el de la rop a he ch a .
IV.
5. La f e r i a a ct u a l . . . . . ............ La ciu dad y sus rel aci one s con los pue blos del valle y con las demas region es del País 1. Con el Sur de la república y del Valle del M a n t a r o ............ .. ............ 2. Con el Norte ............................. .
.
V. VI.
La dinámic a actual de la ciudad en reía c ió n con su c on fi gu r ac ió n u rb a na . . . . Sugerencia s 1. P r e m i s a s 2.
100 103 104 1 07
1 #8 111 115 118 12 $
129 131 132
para el planeamiento . . . . . . . . . . . . . . .
Sugerencias
. . . . . . . .
137
.......... ......... 13 8
3 . C o n c l u s i ó n ......................................... 142 B i b l i o g r a f í a . . . . . . . . . . . . . . ... ............................... 143
- o -
José Ma ría Argu eda s
(1911-1969) está vinculado'
Huancayo por diversas circunstancias.
a
Residid en esta ciu -
dad durante el año 1928, cuando hacía estudios del
tercer
año de Secundaria en el Colegio Nacional de Santa Isabel. En este período edito, junto con otros estudiantes, una rev ista escolar, ll am ada
An to rc ha , don de pub lic ó dos art ícu los lite_
rarios, sus prim ero s ensayo s de escritor.
Años después,
en
las décadas del 50 y del 60, radico por varias temporadas en el Valle del Mantaro, ésta vez ya como investigador de asun tos antro pológic os.
Uno de los primeros frutos de estos tra
"bajos fue su recopilación "Cuentos mágico-realistas y cancijo nes de fiestas tradici onales", que apareci ó en la rev ist a Eol klore Am er ic an o.
En ese mismo año hizo not ar la gran impor
tanc ia cultu ral de esta zona, en el artículo "La sierr a
e n
el proces o de la cul tura peruana", publica do en La
Pr en sa . :
Pero las investigaciones más detenidas que consagró el autor a nuestra región fueron, sin duda, "Evolución de las comuni dades indígenas. El Valle del Mantar o y la ciudad de Huan ca ■ z yo" y el "Est udio etno grá fic o de la feri a de Hu an ca yo ”, es crito como un informe para la Oficina Nacional de Planeamien to y U r b an i s m o, q ue p e rm a n e c i ó h a s t a h o y i n éd it o .
Apar t e
de estos trabajos, que podríamos llamar mayores, Argued as pu blicó una buena cantidad de artículos más breves sobre
esta
región en los que aborda temas de artesanía, música, danzas y lite rat ura oral.
Algunos de estos textos ha n sido re cog i
dos en la incompleta, pero valiosa compilación de la olíra an trop oló glc a de Argu edas hec ha reci ente ment e por el urug ua y ** Angel Rama,^
Hua nca yo ha sido el foco de at ra cc ió n
constante de
Arguedas en casi todos sus trabajos antropológicos.
Lo men
ciona como referencia una y otra vez en "El complejo cultu ra l en el Perií", en "La sie rr a en el pro ces o de la cul tu r a peruana" y en otros estudios.
Este vivo interés que desp er
tó en él el Val le del Ma nt aro
tuvo una
.clara mo ti va ci ón
El autor de Las comunida des de Espa ña y del Perú creía llar en esta región una muest ra de "integr ación pacífica las castas y culturas andina y occidental". de la s i e r r a - d ic e - h a f o r t a l e c i d o t an t o su cultu ral como el Valle del Mantaro".
,
ha de
"Ninguna regió n pe rs on al id ad
A parti r de esta evi
dencia, Arguedas ha sostenido la tesis segdn la cual el mun do andino no desaparecerá al incorporarse a la cultura euro-
pe a r
Muy lejos del indi genis mo cerrado de Luis E. Yal cár -
cel, preveía, con basta nte optimismo, el surgi mient o de s ó l i d a c u l t u r a m e st i za .
una
P e ns a ba , c o m o e l c h i le n o A l e j a n d r o
Lipschütz ^ que el reemplazo de algunos elementos de la cult tura externa como-la vestimenta, la vivienda o la música, no significaba de ningún modo la desaparición de los valores es piritu ales o mora les indios.
Para expr esar esto,
Argueda s
se fun dab a en el hecho de que, a pesar del largo períod o
de
dominación española, la cultura- quechua había sabido resis tir y sobrevivir.
Lo que es inco ntr ove rti ble men te cierto. .
Pero ta mbié n es inexcusable hacer not ar que el antropólo g o vio y estudió el mundo campesino del Valle del Mantaro cuan do "esa má qu in a des tr uc to ra de cultura que ha sido y sigue siendo el sis tem a c ap it al is ta ’ 1, seg ún la fel iz ex pr es ió n de Samir A min, t o da ví a no h a bí a pe n et r ad o c o n l a f u er z a a v a s a l l a d o r a con que lo hace hoy en día.
Le tal'modo que se podría afi r
mar que, si cuatro siglos de feudalismo no fue capaz de ani quilar la cultura andina, cuatro dócadas de capitalismo será más que suficiente para hacer desapar ecer todo vestigio la mis ma (lo que no dejab a de intui r el nov eli sta en las sa ng re s).
de Todas
La me nc ión de Móxi co como el país donde
s e
da 11la pr ueb a más cabal del p or ve ni r ilim itad o de l a cu ltu ra 7 mestiza, in doe sp añ ol a o ind ola tin a" , no vien e a ser sino una prueba en contra y el mejor ejemplo de lo infundado de planteamiento.
su
La Imagen de una cultura mexi can a autónom a ,
nac ion ali sta e "ir red uct ibl e” que "respland ió" has ta los
a—
ños 50 ha quedado ya desvanecida ante la invasión de los va lores y normas de la burguesía internacional que se ha produ
cido en los últimos años en todos los ordenes de su cultura. Hoy puede asegurarse que en ese país ya no queda sino poco de la cultu ra india.
muy
Lo cual demu est ra una vez más
que
la vía capitalista no ofrece tampoco ninguna perspectiva pa ra el desarrollo y fortalecimiento de la cultura nativa.
Cuando Argue das escri bid estos tr abajos estab a fuer temente influido por la antropología culturalista de proce dencia norteamericana que confundía e identificaba la cultu ra con la sociedad y sustituía los términos
de colonialismo
i m p e r i a l i s mo y d o m i n a c i ó n p o r l as e x p r e s i o n e s de clash.", "culture contact",
"c u l t u r a Q "soci al ehange" y otros. P o r
eso, en aquella época, Arguedas no veía con suficiente clari_ dad que la cultura se entrelaza orgánicamente con el sistema social* por lo mismo no poní a en tela de juicio la
valid ez
de la cultura dominante y creía más bien en la llamada "acul turacidn" o "integraci ón cultural"* tanc ia
Result a de suma impor -
saber qué cult ura es la que se propaga, qué cultu r a
es la integrado ra.
Porque "en la cultura, lo mismo que
en
la economía, la tendencia a la internacionalizacidn en la S£ ciedad capital ista tiene ... la señal del aplast amiento
y
des tru cci ón de las culturas de los pueblos oprimidos, de imposición a éstos de modelos de la cultura burguesa".
10
Esto lo comprendió y denuncié nuestro autor en los últimos años de su vida.
En un inestimable artículo "La cul
tura: un patri moni o difíc il de coloniza r"
(1966), esc rito
a
raíz de la polémica que sostuvo con un antropólogo norteame-
-vn-
r i c a n o e n e l X X X V I I C o n g r e so d e A m e r ic a n i st a s , s e ñ al ó gran lucidez:
con
1 1Las' potencias que dominan económica y políti
camente a los países débiles intentan consolidar tal dominio mediante la aplicación de un proceso de colonización cultu ral.
Por medi o del cine, de la televisión, de la ra dio dif u
sión, de mill ones de publicaci ones, se trata de la mental idad
del pueblo.
condi ciona r
Esta gran empresa tiene auxi -
liares influyentes y poderosos entre los socios latinoameri canos de los gran des consorci os, porqu e tales soci os
esi:á:n
ya no diremos "colonizados" sino identificados con los inte res es y, por tanto, co n el tipo de vida, c on las pre fe re n
-
cias y conceptos respe cto del bien y del mal, de lo bello
y
de lo feo, de lo conveni ente.
Con sti tuy en una ext ens ión d e
los núcleos que tratan de "colonizar" a los países sobre los cuales ejercen un casi pleno dominio económico y político".
11
¿En estas cond ici one s es p osible pen sar que Hua n — •cayo y el Valle del Mantaro seguirán siendo "el núcleo indí gena, foco de difusión cultural compensador de la influencia modernizante cosmopolita ejercida por Lima"?
Los dos trabajos que hemos reunido en este volumen, parti cula rmen te el primero, tien en la vir tud de inc itar a una discusión del problema a la luz de la realidad actual.
En "Evolución de las comunidades indígenas" Arguedas enunció por primera vez la importancia que tuvo la alian za de los huan cas -xa uxa s con los españo les en el proces o
de
- ved>
la econ omía y de la cul tura en el Valle del Mantaro, y
que
posteriormente desarrolló con mayor amplitud Waldemar Esp in£ sa, apoyado en el estudio directo de las "Informacio nes" los caciques
Guacrap aucar y Cusichaca.
de
Tamb ién aquí Argue-
d a s h i z o n o t a r l a i m p o r t a n c i a q ue t u v i e r o n l a l l e g a d a
del
ferrocarril y la presencia del enclave minero de la Cerro de Pasco come factores de trans form ació n de las comunidades esta zona. nos - dice
en
"Fuer on estos agentes, que hemos llamado exter los que, en cada comunidad,
fuerza s de prop orci ones diferentes ,
inter vin ier on como
Pero creemos que la sin
gularidad del status del indio y del mestizo exi el Valle del Mantaro, con respecto a otros valles del Perú, fue d e f i n i d a 12 en el período inicial de la Conquista".
En el "Estudio etnográfico
de la feria de Huan ca
yo", preparado en diciembre de 1956, Arguedas hace una des cripció n bastante minu cios a de la form aci ón de la ciudad del orig en y evol uci ón de la feria.
Pero, su afi rma ció n
"que la feri a de Huan cayo no es de orig en colonial",
y de
basa da
en las historias de Oscar 0. Chávez y Josó Varal'lanos, ha si do rect ific ada por Wald emar Espinoza.
El autor de la Histo
ria del Departam ento de Junín sostiene que la feria es " t a n 13 anti gua como la ciudad misma. Fue est abl eci da en 1572 porJerónimo de Silva, según se dice en las "Ordenanzas Genera les",
"por el útil que se les sigue del contrato y co m e r c i o
que suelen tener unos indios con otros así de los naturales como de los forasteros".
Por eso la feria tuvo un c a r á c t e r
general y no solamente fue comercio de productos artesanales
como se suele creer equivocadamente. Arguedas:
Esto lo anota muy bien
"Desde su orig en la fer ia de Huanc ayo no fue
u n
merca do exclu sivo de prod uctos de arte regio nal indí gena - ex p l ic a
fu e u n m e rc a do c om pl et o, e n el c ua l se v e n d i e r o n
tanto objetos de arte popu lar como de man ufa ctu ra
indus
-
trial".^
Al final del estudio hay valiosas sugerencia s sepamos no han sido tomadas en cuenta por quienes t ienen respo nsabil idad del planeamiento
de la ciudad.
que la
En vista de
ello, sigu en teniendo vig enc ia las palabras finales de
este
trabajo: "La ciencia de encausar la expansión de los centros urbanos con el objeto de que tal expansión refuerce las pro pias fuentes del crecimiento que encausa, no ha tenido ningu na intervención, Huancayo.
hasta ahora, en el rápido desa rrol lo
d e
Por el conoc imien to vivo de la may or parte de las
capitales del Departamento de la República, me atrevo a sup£ ner que ninguna ciudad puede ser tan inmediata y fecundamen te benef iciada por el planeamiento.
Puede lograrse allí una 1^ especie de obra maestra en este sentido".
MANUEL J. BAQUERIZO \
-XN O T A S folk lor e Am er ic an o, Nov.,
1953, No.1, pp. 101-293
^
La P r e n s a , 23 de set ie mbr e de 1953
3
Re vi st a del Muse o N ac io na l, 1957, XXYI, pp. 78-151
^
JOSE MARI A ARGUEDAS, Forma ción de una cultura naciona l in
do am er ic an a, Siglo XXI, México, 1975; y Señores e indios acer ca de la cul tur a qu ec hu a, Calican to, Buenos Aires, 1976 . Ang el Rama, a qui en debe con sid era rse como el más acucio-so arguedista latinoamericano, acaba de publicar un penetran te estudio en torno a la "Recuperación del pensamiento míti co en Jos é Ma rí a Arg ued as" , L a ti no am ér i ca , México , No.. 9 1976 ^
Cf. JOSE MA RI A ARGUE DAS, "La sie rra en el proc eso de
,
la
cultura", en Formación de una cultura nacional indoamerica na, Si glo XXI, Méx ico ,
1975, p. 11
^ ALEJANDR O LIPSCHUTZ, Marx y Lenin en la Améri ca Latina y los prob lem as in di ge ni st as , Casa de las América s, La Habana, 1974,
p p .
124 y 128-9
7 JOSE MAR IA ARGUEDAS, "El complejo cul tural en el Pe rú ", en F o r m a c i ó n .,. , p. 6 0
Cf. "Cultura india se extingue en México", La Prensa,7 de
febrero de 1977 ^
GERARD LECLERO, Antrop ología y col oni ali smo , Alberto Cora
zón Edit or, Madrid,
1973, p. 90
'l0 V. K EL LE y M. KOV ALZON,
So ci ol og ía , Cartago, Bueno s Aires,
1974, p. 151 11
"La cultu ra : un patr imoni o d ifícil de colonizar", en Por m ac ió n ... , p. 186 12
Ver en este volumen, p. 11
13 WALD EMA R ESPIN OZA SORIANO, Histor ia del Departamento
d e
Ju ní n, Edi to r Enr iqu e Chip oco Tovar, Huancayo, (Enciclopedia del Departamento do Junín) i&tr Ver en este volumen, p. 107 15
Ver en este volumen, pp. 142-143
1973, p.
204