OTRA OPCION PARA LOS RAVIOLES: RAPIDA SALSA ROSA En una sartén caliente con un chorrito de aceite de oliva, colocá un diente de ajo entero para perfumar (si te gusta). Verté 200 cc de tomate triturado y cociná a fuego bajo por unos minutos. Salpimentá. Incorporá 100 cc de crema de leche y mezclá bien con el tomate. Podés agregar una pizca de nuez moscada.
¡Todolistoparala ravioladadeldomingo!
Amasá con ganas, elegí los rellenos y a disfrutar. Después, una buena siesta. ¡Te la ganaste seguro!
MASA CASERA PARA RAVIOLONES Ingredientes Rolls: MASA HARINA 0000, 600 G HUEVOS, 6 SAL, 1 CDTA. AL RAS AGUA, UNAS GOTAS (SI FUERA NECESARIO)
Rellenos A ELECCION, VER PAGINA SIGUIENTE
Armado HARINA 0000, C/N HUEVO, APENAS BATIDO, 1
Preparación Masa 1. En un bol, colocá la harina y hacé un hueco en el centro. Agregá el resto de los ingredientes (excepto el agua). Integralos del centro hacia fuera, mezclando bien. Si la preparación está muy seca, añadí unas gotas de agua. Amasá por 10 minutos hasta obtener un bollo con textura suave y lisa. Cubrilo con un repasador apenas húmedo y dejá reposar al menos 30 minutos. 2. Espolvoreá la mesada con harina y estirá con un palote o máquina para estirar pastas hasta 1-2 mm de espesor. Cortá segmentos de masa unos centímetros más largos que el tamaño del molde para raviolones y espolvorealos con harina. Apilalos, cubrilos y dejalos descansar a temperatura ambiente en un lugar fresco y seco. 3. Prepará el relleno elegido (en estas páginas te sugerimos algunos).
ideas No olvides dejar descansar la masa una vez formada: es necesario que se relaje para que puedas estirarla bien.
Armado y cocción ESTAS CANTIDADES RINDEN PARA 4-6 PORCIONES.
4. Para el armado. Espolvoreá harina sobre la raviolonera. Sobre ella, extendé un rectángulo de masa y pintala con huevo. Rellená cada hueco
con una cucharada del relleno elegido. Cubrí con otra lámina de masa. Para que se peguen bien los bordes y se corte la masa, pasá un palote por encima. Sacá las piezas del molde con mucho
cuidado. 5. Cociná los raviolones en abundante agua hirviendo con sal. A medida que suben a la superficie, retiralos y servilos con una rica salsa.
