No vivimos bajo la garra fatal de la globalización sino bajo el yugo de un régimen político único y planetario, no reconocido: el ultraliberalismo, que rige la globalización y la explota en detrimento de las grandes mayorías !sta dictadura sin dictador no aspira a tomar el poder sino a dirigir a quienes lo ejercen "iviane #orrester demuestra que no es la economía la que rige la política, sino que esta política de vocación totalitaria destruye la economía en beneficio de la especulación !n beneficio exclusivo de la ganancia, que se $a vuelto incompatible con el empleo !n aras de ella se sacrifican la salud pública y la educación, ambas vinculadas con la civilización %us propagandistas elogian los fondos de pensión, fuentes de despidos en masa, que llevan a los asalariados a auspiciar su propia desocupación& cantan loas a !stados 'nidos por eliminar el desempleo, cuando en realidad lo $an reemplazado por la pobreza (odemos resistir esta extra)a dictadura que margina a sectores crecientes y al mismo tiempo conserva *en ello reside la trampa y también nuestra oportunidad* las formas democr+ticas "iviane #orrester, novelista y ensayista, es autora, entre otras obras, de insi des exilés, "an -og$ ou l.enterrement dans les blés, /e soir, aprés la guerre !s crítica literaria del diario 0e 1onde y jurado del premio #émina 0a última edición de su obra !l $orror económico, (remio 1edias de ensayo 2334, vendió m+s de 56777 ejemplares en mérica 0atina
%!//89N ;<% =! %/80-> 'N !?@<A =8/@='<
VIVIANE FORRESTER
UNA EXTRAÑA DICTADURA
#N= =! /'0@'< !/N918/
@raducción =N8!0 B='N8%CD
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(rimera edición en francés, I777 (rimera edición en espa)ol, I777 (rimera reimpresión, setiembre de I777
@ítulo original: 'ne étrange dictature 8%;N de la edición original: IFI2JF47I52F3 K 0ibrairie rt$éme #ayard, I777 =< K I777, #N= =! /'0@'< !/N918/ =! <-!N@8N, % !l %alvador 6446& 2L2L ;uenos ires eFmail: fondoMfcecomar v (icac$o jusco II5& 2LI77 1éxico = !
8%;N: 367F665FJ6F #otocopiar libros esta penado por la ley (ro$ibida su reproducción total o parcial por cualquier medio de impresión o digital, en forma idéntica, extractada o modificada, en castellano o en cualquier otro idioma, sin la autorización expresa de la editorial 81(
I
=ía a día asistimos al fiasco del ultraliberalismo /ada día, este sistema ideológico basado en el dogma Oo el fantasmaP de una autorregulación de la llamada economía de mercado demuestra su incapacidad para auto dirigirse, controlar lo que provoca, dominar los fenómenos que desencadena tal punto que sus iniciativas, tan crueles para el conjunto de la población, se vuelven en su contra por un efecto bumer+n, y al mismo tiempo el sistema se muestra impotente para restablecer un mínimo de orden en aquello que insiste en imponer Q/ómo es posible que pueda continuar sus actividades con la arrogancia de siempre, que su poder tan caduco se consolide y despliegue cada vez m+s su car+cter $egemónicoR %obre todo, Qde dónde viene esta impresión creciente de vivir atrapados bajo una dominación inexorable, SglobalizadaS, tan poderosa que sería vano cuestionarla, fútil analizarla, absurdo oponérsele y delirante siquiera so)ar con sacudirse una omnipotencia que supuestamente se confunde con la GistoriaR Q qué se debe que no reaccionemos, que sigamos cediendo, consintiendo, atenazados, rodeados de fuerzas coercitivas, difusas, que parecen saturar todos los territorios, ancladas, inextricables y de orden naturalR !s $ora de despertar, de constatar que no vivimos bajo el imperio de una fatalidad sino de algo m+s banal,
de las empresas, esa gallina de los $uevos de oro, depende la creación de puestos de trabajo, la disminuF ción del desempleo, en fin, la suerte de la mayoría (ero este argumento olvida que la empresa $abía alcanzado la prosperidad empleando a los que a$ora despide 0o que desea aumentar no es su volumen de negocios sino, precisamente porque es próspera, la rentabilidad que obtiene, y que obtienen sus accionistas, de ese volumen TD para ello no $ay que crear puestos de trabajo sino ec$ar trabajadoresU
su $aber no tenía otra realización de beneficios que esos L7777 despidos
@ambién olvida que en el mundo entero, mientras se repite el estribillo oficial, Sprioridad a la creación de puestos de trabajoS, las empresas Ogeneralmente muy rentablesP que despiden masivamente mejoran su cotización en la ;olsa justaFmente por ello, en tanto sus directivos proclaman que su modo de gestión preferido es la reducción de los costos laborales, o sea los despidos en masa /ada día $ay una lista de ejemplos
!l 23, la privatizada =eutsc$e @eleVom anuncia 57777 despidos en tres a)os
"eamos algunos, entre muc$os, correspondientes a marzo de 2334: !l 5, @@ Oel gigante norteamericano de las telecomunicaFcionesP, que dos meses antes $abía anunciado L7777 despidos, informó a la prensa que el sueldo de su presidente,
!l 3, %ony anuncia la eliminación de 25777 puestos& su cotización aumenta ese día en ,L2 puntos y al siguiente en L,22 !l 22, lcatel, con 26777 millones de francos de gananFcias, anuncia 2I777 despidos, con los cuales suman J7777 en cuatro a)os
!l I6, Vai anuncia entre 26L y 27 despidos en su planta de Gonfleur, donde emplea a LL trabajadores 1otivo: su traslado a -ran ;reta)a y @ailandia !se día, %Wissair suma a una primera oleada de 2477 despidos otros 2I77 !l objetivo: la competitividad y reducción de costes en 677 millones de francos suizos OI,22 millones de francos franceses o L57777 dólaresP #rance @élécom, con 26777 millones de ganancias, no tomar+ empleados, y así sucesivamente !stos pocos ejemplos de pr+cticas que se vuelven cada vez m+s $abituales demuestran la inco$erencia de proposiciones como las siguientes: el empleo depende del crecimiento& el crecimiento, de la competitividad& la
!s un régimen autoritario capaz de imponer las coerciones reclamadas y otorgadas por su poder financiero sin poner de manifiesto el menor aparato, el menor elemento que deje traslucir la existencia del sistema despótico instaurado para implantar su ideología imperiosa !sta política se pretende SrealistaS a la vez que impone una indiferencia asombrosa respecto de la realidad !s una política única, dispuesta al divorcio de la democracia, pero por a$ora lo suficientemente poderosa para no interesarse por ello S'na políticaS, digamos mejor un nuevo régimen, oculto detr+s de $ec$os económicos supuestamente ineluctables, tanto menos advertido por la sociedad por cuanto ésta respira y circula en una puesta en escena y una estructura democr+ticas 0o cual no carece de importancia& lejos de ello, debemos conservarlas a toda costa mientras aún $aya tiempo para liberamos de este régimen, de esta extra)a dictadura que cree poder darse el lujo, mientras sea poderosa, de mantener el marco democr+tico
II
Q0o m+s urgenteR %acudirse la carcaza de la propaganda partar con paciencia las preguntas falsas que disimulan los verdaderos problemas Negarse a manosear, bajo el control de aquellos que los explotan, los datos superados que ellos ponen de relieve para $acernos aplicar las reglas de juego que rec$azamos& no caer, con el pretexto de buscar soluciones r+pidas y a toda costa, en la trampa de elegir aquellas previstas y dictadas por el adversario (or lo tanto, lo importante es no dejarse fascinar por esas cuestiones planteadas y mac$acadas sin cesar, que ocultan la realidad y sobre todo el $ec$o de que considerarlas v+lidas, y las únicas v+lidas, es parte del problema 0a consecuencia de ignorar los problemas reales y los datos verdaderos es que se los padece tal como disponen aquellos que los crearon y aseguran así su perpetuidad $ora bien, debatimos interminablemente en torno de estas versiones adulteradas, redundantes, presentadas por los que est+n interesados en censurar los orígenes de la situación y que las reemplazan por sus propias conclusiones presentadas con la forma de postulados =e manera que los problemas Fque $an sido escamoteadosF sean abordados siempre a la luz de esos postulados 'no de ellos, sin duda esencial, decreta la prioridad de la ganancia& se supone que la supremacía de
todo, se unan a su causa, presentada como de interés general, pero que es la de la ganancia "emos cómo funciona este método, que consiste en dar por seguro aquello que no se $a demostrado y guardar silencio sobre lo que es verdadero 0o esencial es disimular el papel de la ganancia, el de la política derivada de ella, $acer olvidar su existencia misma justamente cuando se vuelve m+s invasora, activa y omnipotente /on ese fin, se imputan los azares del empleo Fdespidos, flexibilidad, bajos salarios, entre otrosF a la competitividad, que sirve de parac$oques aunque en realidad no afecta en absoluto el trabajo en su conjunto /ualquiera que sea la empresa que gane la competencia, esto no afectar+ el número de puestos de trabajo, salvo que se trate de una fusión o reventa 0o que $abr+ es muc$a propaganda sobre la competitividad para facilitar la aceptación de las políticas laborales desastrosas, que conducen a la decadencia de la sociedad /ierta propaganda concentra en estas rivalidades el antagonismo de quienes sufren, en verdad, el yugo de la ganancia& trata de convencerlos de que tomen partido, se desvíen de su blanco natural para asociarse con los intereses de uno u otro de sus adversarios y se unan a ellos incluso en sus luc$as intestinas Este es uno de los puntos fuertes del método: enrolar furtivamente en las filas del sistema a los que él explota, a los que deberían concentrar sus fuerzas en oponérsele /onvencer a
quienes se desea someter de que éste es su destino natural /onvertirlos en un público crédulo, o que parece serlo Flo mismo daF, de enfrentamientos comerciales librados a su costa por cómplices que fingen ser adversarios !stos adversarios est+n unidos en la empresa de convencer a los explotados de que se plieguen a su programa y lo apoyen !n realidad es una tarea pesada, muy pesada, someter a toda la población del planeta& no es f+cil condicionarla, lograr que apoye aquello que es nefasto para ella y renuncie a las conquistas de un largo pasado de luc$as, $acerla regresar e imponerle todo un cúmulo de coerciones, velando a la vez para que no se subleve Gay que tener en cuenta a esta población bajo un régimen que aún se considera democr+tico D al mismo tiempo ocultar la pregunta que, al ser expresada, podría transformarse en: SQcómo desembarazarse de élRS
importancia a los ojos de las empresas %i les fuera tan necesario o siquiera útil como antes, Tla mayoría estaría dirigida por masoquistas empedernidosU T;asta abrir un periódico, escuc$ar la radio o mirar la televisión para enterarse diariamente de nuevos despidos en masa agravados con supresiones de puestos de trabajo, realizados por empresas florecientes que luego se vuelven m+s rentables aún (or su parte, los directivos de la economía privada proclaman que no se trata de accidentes coyunturales sino de una expresión de la SmodernidadS, su técnica gerencial, su lógica "eamos algunos ejemplos, que se suman a los anterioresL y corresponden a noviembre y diciembre de 233: !l 5 de noviembre, %ogenal, I67 a I7 despidos de un plantel de 2I77 asalariados
!l I4, @$omson\=assault !lectronic OfusiónP, 2J77 puestos eliminados !l I, 1onoprix, sede de (arís, supresión de J77 puestos de un total de 2I77 !l J7,
!l 2I, /ummins [artsila O1ul$ouseP, 677 despidos de 577 asalariados
!l 6, Yo$nson _ Yo$nson, 677
!l 2J, %$ell, J777 puestos de trabajo eliminados en !uropa 1onsanto anuncia de 577 a 2777 despidos
!l , =eutsc$e @eleVom OprivatizaciónP, 2L277
!l I2, %eita, I f+bricas cerradas Oy, en cada caso, una región empobrecidaP, prevé la eliminación de por lo menos 677 puestos de trabajo L
"éanse las pp 3 y 27
!l 5, #(, I77 despidos
!l 27, Nort$rop, 277 que se suman a los 777 anunciados previamente %mit$ and Nep$eW, L7 %eb, J36
!l 25, /itigroup, el 6^ del plantel, es decir, 27L77 despidos !l 2, 0aboratoires (ierre #abre, 253 despidos !l I2, @$omsonF/%#, L777 despidos en total, J777 en #rancia @omando otros casos al azar, 22777 despidos en julio de 2333 tras la fusión de xa y <$óneF(oulenc, LI77 Opara empezarP después de la de !lf y @otal fina, sin contar otros miles de despidos provocados por las fusiones, por ejemplo la de ;N( y (aribas, o estrategias de productividad como las de 1ic$elin o la sueca !ricsson O27777 despidosP, o la de (rocter\-amble que, con ganancias de J57 millones de dólares, cierra 27 f+bricas en 2333, lo cual entra)a la desaparición de 26777 puestos de trabajo& su presidente y gerente general, =urV Yager, invoca la necesidad de crear Svalor para el accionistaS6 !n cambio
#uente: 0e 1onde
cantidad despreciable de puestos de trabajo, lo cual demuestra claramente el $umor del mercado (or ejemplo, Tcuando el !stado debe SfinanciarS los empleos en el sector privadoU T/uando ofrece a las empresas una buena parte de los salarios adeudados a sus empleados para que SpuedanS pagarlosU T%orprendente limosnaU 1an+ para el sector privado, pura SasistenciaS, no publicitada, que se supone debe remendar, retrasar y sobre todo ocultar el derrumbe del trabajo %índrome del avestruz D sobre todo infantilismo, que recuerda esos juegos en los cuales los padres dan unas monedas a sus $ijos para que jueguen al tendero 8nfantilismo, sí, pero no ingenuidad, porque de esa manera cada ciudadano contribuye a las nóminas de las empresas: Tel trabajador paga para que se le pague y de esta manera la empresa recibe un reembolsoU QGasta cu+ndo seguir+ esta estafaR Qlguien puede creer que, si tuvieran necesidad de esa mano de obra, las empresas se privarían de ella, con subvenciones o sin ellasR Q/ómo es posible que a propósito del desempleo se mac$aquen siempre los mismos argumentosR Q(or a)adidura, falsosR Q/ómo es posible que se insista en que las escasas conquistas sociales conservadas, las débiles reticencias al ultraliberalismo, sean la causa del desempleo en !uropa y particularmente en #ranciaR QD
mismos problemas, aunque con mayor aspereza en los países m+s pobres !n todas partes, todos parecían tener conciencia del origen de la situación, del car+cter político de la dominación económica que causa semejantes estragos !n todas partes me pareció escuc$ar las mismas palabras enérgicas, el mismo rec$azo !xiste una opinión pública globalizada, convencida, pero cada uno tiende a creerse un solitario en sus convicciones !n ese malentendido radica lo esencial !sta lucidez, este rec$azo de una propaganda colosal, eficiente y enga)osa, revela la cualidad desgarradora de aquellos a quienes se quiere llevar a la ruina
V
Q%omos conscientes de elloR unque el empleo desaparece o se degrada, el trabajo est+ m+s disponible que nunca, necesario y vacante pero descuidado, pro$ibido o incluso conscientemente eliminado =iríase que para eliminar el desempleo es indispensable restaurar solamente aquellos puestos de trabajo suF peditados a las ganas o las posibilidades de empresas que ya no dependen del empleo, en un régimen basado exclusivamente en una rentabilidad que impone restricciones en los sectores de los cuales la civilización no puede prescindir 0os oficios y las profesiones indispensables a$ora son inútiles, prescindibles, incluso nocivos para los presupuestos porque no ayudan a los megabeneficios obtenidos de la especulación (or lo tanto, Qpara qué formar a los SjóvenesS en profesiones consideradas parasitarias y demasiado costosasR dem+s, Qpara qué SemplearlosSR 0as empresas esquivan esa responsabilidad aunque se las subvencione para ello y aunque embolsen esas subvenciones !n cuanto al sector público, su vocación es reducirse, o al menos eso se le exige Xueda por ocupar a esos jóvenes, esas ni)as en el linde de su destino, siquiera para tenerlos tranquilos y alejados del desempleo oficial, el que figura en las estadísticas =e a$í los StrabajitosS artificiales que se ofrecen a las generaciones r+pidamente privadas de futuro (ara
0a cibernética no es la única responsable, o no lo es por sí misma: la culpa es de quienes la usaron, la explotaron para acceder sin trabas a un totalitarismo disimulado, que no dice su nombre #altó vigilancia Gubiera sido necesario prever el impacto de las nuevas tecnologías y prepararse políticamente, legislar sobre sus efectos para prevenir su desviación !n la época en que esa situación nueva aún no $abía caído como re$én, no $ubiera sido difícil visualizarlo políticamente en lugar de permitir que desnaturalizara la política $ora bien, cada uno siguió su camino sin prevenirse contra aquello que podía representar una gran esperanza o comprometer dr+sticamente el equilibrio de la $umanidad& durante décadas, nadie tuvo en cuenta su existencia por entonces potencial, no para rec$azarla de plano sino, por el contrario, para acoger aquellas virtualidades, aún realizables, que resultaran favorables a todos Q(or qué no se modificaron los conceptos mismos de trabajo, empleo y sociedad para obtener consecuencias racionales y beneficiosas, pero sobre todo no perniciosas, de unos progresos tecnológicos tan prometedoresR !s alucinante que el lugar ocupado por las m+quinas no fuera compensado eventualmente por un
modo de vida distinto en función de la nueva coyuntura& que no se buscara desde el comienzo la manera de reemplazar esos puestos de trabajo que desaparecían a la vista de todos, que no se pensara en la manera de remediar el fenómeno, compensando ante todo a las personas perjudicadas
%i se las $ubiera tomado al comienzo, esas medidas $ubieran parecido evidentes y nadie se $ubiera opuesto a ellas& $ubiera sido f+cil aplicarlas en cada caso de acuerdo con las nuevas circunstancias %e trataba de incorporar los progresos tecnológicos sin sus efectos perjudiciales cuando aún existían pocos intereses invertidos en sus consecuencias @odo se $ubiera podido resolver (ero esta etapa crucial de la $istoria de la $umanidad se desarrolló en medio de una negligencia inconcebible, tanto m+s por cuanto casi nadie tenía interés en iniciarla, ni menos aún aquellos que se manifestarían posteriormente T(ero lo m+s inconcebible es que ya estamos a$íU No $emos enfrentado el problema y menos aún lo $emos analizado Ga pasado el tiempo y a$ora estos azotes parecen tradicionales, normales porque se los puede imputar a un fenómeno inexorable, no a una serie de negligencias dram+ticas que, por el contrario, lo ignoraron
ingrato, porque no sólo su despido les aporta cada vez una peque)a suma, sino que son, como dijimos, indispensables %iquiera para ayudarlos a transformar una civilización de coacción basada en el trabajo asalariado en este extra)o régimen de una dictadura basada en el desempleo y la degradación del trabajo
VIII
(ara los asalariados de una empresa $ay una gran diferencia entre los despidos Sen secoS y la eliminación de puestos de trabajo SliberadosS (ero las dos medidas afectan el futuro del trabajo de igual manera e indican la misma degradación Yuntas demuestran $asta qué punto la reducción de planteles, lejos de ser un inconveniente para las firmas, les traen ventajas previstas y reclamadas @ambién revelan cómo est+n integradas en su din+mica y cómo, con crecimiento o sin él, el trabajo $a perdido el lugar y la jerarquía que tuvo anteriormente Nadie $a se)alado esto en las luc$as por el trabajo, siemF pre centradas en criterios que ya no son v+lidos =e a$í los se)uelos que falsean el juego, desorientan a la opinión pública y frenan de antemano las iniciativas tomadas con frecuencia a partir de ideas erróneas Q/u+l es el enga)o esencialR /reer que empresa y empleo siguen estando estrec$amente fusionados Gabría que ser ciego para no ver las pruebas recurrentes de que la empresa puede Fcada vez m+sF prescindir del empleo, pero considera que no puede prescindir de reducirlo D no tanto por razones técnicas sino de orden, al fin y al cabo, especulativo y por la necesidad de mantener su prestigio en el mundo empresario =espedir, si es posible en cantidades masivas, significa para ella inscribirse en la ortodoxia ultraliberal, obtener ganancias espectaculares y a la vez granjearse una buena reputación en las plazas burs+tiles
garantizar la compensación por las posibles pérdidas: pérdidas compartidas, salarios a riesgo T/aricatura de sociedadUJJ @ransformar el conjunto de la sociedad en un club de accionistas, jugarse SlibrementeS una parte del sueldo, acaparar la suma colosal de los a$orros individuales, usarla siempre SlibrementeS, en particular contra sus propios poseedores, neutralizados por su alianza con esa manera de actuar: Tapoteosis del ultraliberalismoU 'nir en un coro planetario a los accionistas que desconocen lo que se trama en su contra, pero que ellos sostienen, concentrada su atención en el éxito de aquello que los destruye: TmagníficoU %e $a dic$o que Sel $ombre es el lobo del $ombreS: cada uno es lobo de los dem+s Q%e convertir+ JJ
S%ocios socialesS, extra)a definición de la convergencia entre directivos y sindicalistas que toman sus deseos por realidades, suponiendo que los socios est+n tan unidos en las cuestiones sociales, son tan buenos camaradas en el seno de una asociación benéfica, que actuar como adversarios ser+ dar pruebas de una agresividad de la peor mala ley =ecididamente, la ideología ultraliberal presta muc$a atención al lenguaje, y con justa razón (ero, Qpor qué $abremos de aceptar esos $allazgos sem+nticosR Q(or qué no estipulamos que son Sinterlocutores socialesS, que no tienen otro motivo para reunirse que el $ec$o de no estar de acuerdo, que sus intereses son divergentes, que por lo tanto no son socios y se enfrentar+n sin llegar forzosamente a un acuerdoR
al $ombre en lobo de sí mismo, socio de los lobos que buscan destrozarloR
0os fondos liberados por el a$orro en sectores vitales también ser+n invertidos en la especulación, para ofrecer a unos pocos una plusvalía colosal en tiempo récord, el de las operaciones en torno de las cuales se ordena todo
X
QXué sucede $oy con los consumidores, a los que se atribuye una misión inamovible, una de las últimas que se nos concede: la función SrealS del consumidorR Q/u+les son sus poderesR Q/u+l es su influencia sobre la economía privadaR Q/ómo se concilia la economía de mercado con la expansión espectacular de la masa de personas que viven cerca o debajo del umbral de la pobreza, incluso en los países ricosR Q/ómo puede permitirse ese lucro cesante, esa pérdida de consumidores que se acrecienta debido al desempleo, la pobreza de las indemnizaciones, los trabajos precarios mal remunerados, así como la Smoderación de los salariosSJR (or su bien, Qno le convendría frenar los despidos e impulsar el aumento de los salarios y la ayuda socialR QNo debería liberarse de la in$ibición generada por su propio p+nico a la inflación, la cual no constituye en absoluto la amenaza contra la cual se defiende, pero le $ace temer cualquier tendencia al aumento de las remuneraciones, a la ampliación demasiado veloz del consumoR J
Nuevo descubrimiento de nuestras preciosas ridiculeces 0a SmoderaciónS en cuestión se refiere al congelamiento o la rebaja de los salarios, pero da a entender que los patrones deben reprimir su impetuosa generosidad, que los llevaría a cometer locuras, a verter lluvias de oro sobre sus desconcertados trabajadores, los cuales no pueden sino aprobar la prudencia de la SmoderaciónS
planetaria que se ejerce sobre sí misma y la impulsa $acia una era de monopolios monstruosos 0a gravedad del fenómeno no se desprende únicamente del $ec$o, grave de por sí, de que en cada ocasión provoca las consabidas reducciones de costes, sobre todo del trabajo, con los consiguientes despidos masivos "eamos algunos pronósticos aparecidos en el NeW DorV @imes y el #inancial @imes en diciembre de 233, sobre ciertos planes de despidos previstos, casi todos vinculados $oy con compras o fusiones de empresas:J3 •
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J3
=eutsc$e @eleVom proyecta la supresión de I7777 puestos de trabajo y apela a eventuales fusiones (róxima adquisición de 1obil por !xxon: supresión prevista de 3777 puestos 1+s adelante $abr+ otras (royecto de compra del ;anVers @rust por el =eutsc$e ;anV: eliminación de 6677 puestos /itigroup, que anuncia la eliminación de 27L77 puestos, el 4^ de sus efectivos, lo $ace sin duda por la elegancia del gesto, ya que aparentemente no tiene previsto participar de compra o fusión alguna
8nforme sobre el desarrollo $umano O(N'=P, ob cit
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1+s modestos, @exaco, /onoco, %$ell y /$evron, ;ritis$ (etroleum y moco prevén el despido de 4777 asalariados apenas se autorice su fusión
%e $ayan cumplido o no estas previsiones, la suma real de los despidos fue infinitamente mayor que la se)alada aquí& se los consideró absolutamente naturales, sobre todo en vista de las circunstancias, y que respondían de maravillas a los términos elocuentes de SreestructuracionesS y SracionalizacionesS que se supone los caracterizan #rente a semejantes operaciones que llevan a la fusión de grupos cada vez m+s gigantescos, resultado a su vez de operaciones similares, es f+cil de imaginar que para ellos la producción es algo trivial, superado /omo se advierte, lo que est+ en disputa entre los grupos no son los clientes sino los grupos mismos !l producto de tantos sacrificios en aras de la competitividad se invertir+ en la financiación de esas compras y fusiones, las cuales provocar+n nuevas reducciones de personal, las cuales financiar+n nuevas compras y fusiones, que a su vez permitir+n nuevas economías, que a su vez permitir+n crear sociedades mastodónticas, y así $asta el infinito !stos conjuntos monstruosos suelen ser imposibles de dirigir, cuando las unidades que los integran funcionaban muy bien mientras no formaban parte de un
!nfrentados y sobre todo vigilados por la opinión pública, los funcionarios de la 1/ revelarían, incluso a sus propios ojos, la vacuidad de su política cuando no era la del $ec$o consumado No fueron antagonismos internos ni externos los que provocaron tan patético naufragio de la cumbre de %eattle sino una simple mirada sobre su vacuidad tacando punto por punto, de a un suceso concreto por vez, en dimensión $umana, se $ace posible desestabilizar una construcción tan imponente, supuestamente inquebrantable, y que sin embargo no se asienta sobre cimientos sólidos ntes bien se apoya en valores virtuales, m+s difíciles de combatir que otros si uno lo $ace en su propio terreno, pero que se derrumban o al menos flaquean frente a las personas vivas, en el terreno de la realidad, en el mundo tangible con el cual conviven
XI
Q(uede uno ser contempor+neo de su tiempoR 0a Gistoria se escribe con el caos de los muertos y los vivos 'n caos lleno de sentido, siempre en carne viva, punzante 0as generaciones que se suceden no est+n constituidas por bloques sucesivos& las vidas de aquellos y aquellas que las componen no son contempor+neas en toda su extensión sino que nacen, desaparecen y nacen y mueren nuevamente en el desorden y la confusión, y así $a sido desde el principio del tiempo 0a ley se forma y se transmite a través de ese magma 'na aventura tan difícil, improbable y apasionada, fascinante a pesar de las aflicciones, merece admiración, como la merecen aquellos que la viven, que perseveran en el deseo de vivirla a pesar de la brevedad de la suerte que le toca a cada uno simismo es admirable la capacidad de cada uno de insertar su $istoria singular, su propia biografía, en el seno de esta fugacidad sin dejarse abrumar, paralizar, en fin, enloquecer por la urgencia Q=ónde nos encontramos en la GistoriaR Q!s posible que a medida que avanza, y nuestras potencialidades avancen con ella, se estrec$e $asta reducirse a los juegos imbéciles de un sistema depredador, a sus crímenes tan difundidos, tan proF pagados que forman parte del paisaje y se refuerzan con toda tranquilidadR QXue sólo sobreviva una codicia $istérica, sin objetivos reales, capaz de arrasar con todo bajo la égida de unos pocosR
Q!s esto lo que representa la dignidad otorgada por el trabajoR Q!s por eso que se lo debe glorificarR No, lo prioritario no es el trabajo sino las personas que se supone deben entregarse a él al precio de semejantes dificultades $ora bien, ellas no tienen como vocación principal ser SempleadasS por aquello que las destruye& lo importante no es Sponer la gente a trabajarS& lo importante es la gente D su libre albedrío %i el desempleo debe ser reemplazado por la pobreza, si lo único que califica a una sociedad es el número de puestos de trabajo aunque esos mismos empleos signifiquen pobreza, $umillación y desprecio, si se los debe considerar como otras tantas bendiciones graciosamente otorgadas y que se deben aceptar a cualquier precio, entonces esa sociedad, lejos de ponerse de pie, ser+ perversa y deteriorada de arriba abajo !l Sempleo para los jóvenesS, si se reduce a un vagabundeo de un peque)o puesto a otro, si no crea ningún porvenir ni brinda oportunidades reales de vivir a tono con una sociedad que esté a su vez a tono con la vida& si no tiene otro fin que mejorar las estadísticas, que Sno carecerS de trabajo $oy, pero sin la menor garantía para ma)ana, sin posibilidad de dar pruebas de las propias aptitudes, $acerse cargo de la propia vida de adulto, entonces ese trabajo no tiene otro sentido que el de legitimar una decadencia general
/ada uno comienza a comprender que la salvación no radica en seguir un modelo perimido que somete al individuo a un pasado presentado como futuro, a costa del sacrificio del presente, sino, por el contrario, en asumir el presente y rec$azar una política que exalta la =eclaración 'niversal de los =erec$os del Gombre a la vez que la considera perjudicial para la modernidad
